He gozado, según mis creencias, según mis propios engaños personales, de una familia tranquila, disfrutable, unida y más regia que muchas de las familias verdaderamente oriundas de esta bella ciudad por mucho tiempo. Me ha tocado ver de todo, desde el clásico padre golpeador hasta los que se pelean todos los días por cuestiones mundanas. Que si el dinero, que si la otra, que si la gallina puso un huevo... Regularmente esto no se vive por acá, en estos rumbos de mi pintoresca familia las cosas suelen ser más tranquilas, las hermandades más apegadas, los lazos más sinceros (dicen...) Yo tengo rato pensando que esto no es cierto... (cuando digo rato me refiero a una decada) pero por mi bien personal , por mi salud mental y por no meterme en mierdas filosóficas, es un tema que mejor no trato en mis conversaciones casuales ( ahora entiendes? ) Estas últimas semanas han sido una tortura. Hay gritos, hay puertas asotadas, hay ignorancia completa de una existencia avanzando sin rumbo fijo. En
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